lunes, 22 de agosto de 2011


¿Quién escribió las reglas, quién puede cambiarlas?
¿Contra quién he de elevar el dedo acusador?
¿A quién he de culpar por este desprecio?
¿Quién ha de resarcir el daño?
¿Es que mis preguntas caen en el vacío como lágrimas redondas?
¿Dónde, dónde he de encontrar la paz mental?
¿Dónde, dónde está lo que me ha sido arrebatado?
¿Hacia dónde he de caminar para encontrarme con el horizonte?
¿Acaso no hay nada al final del arcoíris?
¿Cuándo ha de cesar este interminable brotar de auto reproches?
¿Dónde terminará mi maldad auto infringida?
¿De esto se trataba?¿fue esto, siempre, desde el inicio?

Basta.

jueves, 6 de enero de 2011

Vacíos valiosos.

No es lo que me das,
sino lo que me quitas.

Me quitas el peso,
las ganas de gritar.
Quitas el polvo
que en mi corazón se solía acumular.
De mi cabeza las telarañas,
arrancas con sólo mirar
lo que hay en el fondo,
sin parpadear.

Quitas las espinas que había en mi corazón,
un corazón tan maltratado que creía incapaz de tanto amor.
Quitas el cansancio de mis pies
que hoy quieren contigo
dar la vuelta a un mundo
que no imagino ya nunca
recorrer en soledad.

Le quitas el mal humor a mis días,
las arrugas a mi entrecejo,
los tics nerviosos a mis párpados.

Le quitas a mis días el aburrimiento.
A mi tristeza las lágrimas.
El frío a mis inviernos.

Es increíble, que cada día contigo
sea aún más valioso,
no por lo que me das
sino por lo que me quitas.

¿Quién escribió las reglas, quién puede cambiarlas? ¿Contra quién he de elevar el dedo acusador? ¿A quién he de culpar por este desprecio? ...